Ubicada en el exclusivo barrio de Olivos, esta residencia combina amplitud y elegancia en un lote de 750 m², con un frente de 17,32 m y una profundidad de 43,30 m. La vivienda cuenta con 295 m² de superficie cubierta, distribuidos en tres plantas que ofrecen un diseño funcional y espaciosas áreas de confort.

Al ingresar, el amplio living‑comedor se abre a ventanales que marcan la entrada y el contrafrente, presentando pisos de madera y una chimenea que aporta calidez. Un toilette de recepción completa la zona de entrada. En la planta baja se ubica una master suite con vestidor, baño con antebaño y hidromasaje, y una suite junior con placard empotrado y baño completo. Un cuarto de usos múltiples añade versatilidad a la distribución.

La planta alta alberga dos dormitorios adicionales y un baño completo, manteniendo la privacidad y comodidad de la zona residencial. La cocina‑comedor, con vista al jardín, dispone de muebles bajo mesada, alacenas y una isla con anafe empotrado, facilitando la preparación de comidas con estilo.

El quincho, con grandes ventanales y revestimiento en piedra, incluye una cocina completa con alacenas, grill y acceso a la piscina. Un baño exterior completo garantiza comodidad para los invitados. El jardín se puede acceder desde la lateral de la propiedad, sin atravesar el interior de la casa, ofreciendo un espacio privado y relajante.

El conjunto dispone de garaje cubierto y lavadero, complementando la funcionalidad del inmueble. La ubicación estratégica, cercana a las principales avenidas y áreas comerciales, realza el potencial de esta casa como un refugio urbano de alto nivel.